Otra atracción importante que tiene el centro histórico de Lima es el
Museo de la Inquisición que fue creado en 1968 con la misión de conservar,
difundir, investigar y exponer los inicios y evoluciones de este organismo. Es
uno de los más visitados y conocidos museos que tiene nuestro país.
Todo comenzó a finales del siglo XVI, cuando la Iglesia requirió que se
debía castigar a los herejes y se instaló la Inquisición en nuestra capital. En
este recinto, se torturaba y castigaba a personas que iban en contra de la fe
cristiana. Entre los delitos se encuentran la herejía, adivinación, hechicería,
demonolatría, astrología entre otros.
El museo cuenta con 12 cárceles y unas 10 salas de las que se puede
visitar las siguientes:
- Sala del Secreto
- Sala de Respeto
- Sala de Audiencias
- Sala de los procesos
- Sala de los autos de fe
- Sala de las celdas secretas
- Sala de las sentencias
En el salón principal se puede apreciar uno de los techos artesonados en
madera tallada que mejor conserva tiene en Lima. Luego se recorren galerías
subterráneas y mazmorras.
Tipos de tortura
Dentro de las formas de castigo expuestas en este museo destaca el potro
por su buena representación dentro de la sala de torturas. Este tipo de sanción
tomaba aproximadamente una hora y cuarto en el que se echaba a la víctima, se
le ataban las muñecas al cabecero. Los pies se ataban y se fijaban a un
rodamiento por medio de un mecanismo que iba enrollando la cuerda a los pies,
generándose así una tensión que hacía que el cuerpo se estirase al máximo. Las
articulaciones no podían dar más y acababan desencajándose hombros y caderas.
Otra forma de castigo era la polea de brazos, en la cual se podía empeorar
colgando varios kilos más de los pies del detenido. Estaba también el
ahogamiento y el garrote español. Este último tenía lugar en la Plaza de Acho.
El Potro |
Polea de brazos |
Tortura del agua |
Condenados y acusados
Sólo a 32 personas condenaron a muerte. Se recibieron muchas denuncias,
pero sólo 1477 de 3000 denuncias que provenían de Bolivia, Chile, Paraguay y
Uruguay, fueron tramitadas. De los 1477 muchos fueron torturados: 23 por ser
judaizantes, 6 protestantes, 2 católicos por renegar de la iglesia y uno
acusado de creerse un iluminado, que desafiaba la religión.
El fin de la inquisición en Perú fue en 1820 por orden de las cortes
españolas, pero después de un tiempo volvieron; sin embargo, ya no en nuestro
país gracias a su independencia.
Anímate a visitar este museo. El recorrido es de menos de una hora, pero
es muy interesante y divertido.
Precio
¡Gratuito!
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Atención
Lunes a domingos
9:00 am – 5:00 pm
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Dirección
Jirón Junín #548, Centro de Lima, en la Plaza del Congreso de la
República
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Teléfono
(511) 311-7777 anexo 2910
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Escrito por Grecia Alzamora